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CEGUERA

Hombre en patio carcelario con venda en ojos


CEGUERA

Soy rehén forzosa de tu encanto.
En mi pecho anida un cuaderno de poemas
una y mil veces remendados.
Mis pies cabalgan sobre las cenizas 
de tu aliento y tus risas,
evaporados hace tiempo
entre la frivolidad de los chistes
y la carnaza infame de aquella a quien besabas.

Y de nuevo es el reloj,
verdugo de alarma roja,
quien me devuelve a la realidad
de este solitario presente,
y convierte mi nariz y mis ojos
en raíz de nubarrones de lágrimas baldías
con que pretendo borrar
la ofensa de esta palabra...
AMOR, maldito puente
que me une a tu persona
y siembra de espinas todo a mi paso...
AMOR, cofre de tesoros escondidos, 
nombre del diccionario
que atesoro en mis brazos
y espolea mi corazón cada día.


Te invito a que pasees por las letras de mi otro blog: www.cuentosrecienhorneados.blogspot.com

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