Hacía tiempo que estaba buscando salida a los maravillosos recuerdos que tengo del pueblo de mi madre, la tierra que más adoro en este mundo, y por fin ha salido algo que a mí me llena. Quería compartirlo con vosotros y aprovecho a dedicárselo a mi familia y amigos (sobre todo a los que tenemos la suerte de haber pisado aquellas tierras de Castilla alguna vez). Un besazo a todos. Eres más Mi Castilla, Mi Palencia, Mi Fresno, Mi tesoro, que yo el corazón del que sólo te habita en verano. Al aire que me da sustento renuncio con alegría si la acidez del limón que se rebela en mi garganta (el resto del año), cuando estoy lejos de ti, se disipara en el agua de mi saliva y volvieran: a mis ojos... la luz de tus campos; a mis pulmones... la brisa de tu aire libre de las asperezas de la ciudad industrial; a mis labios... el rojo de tus amapolas; a mis pies... el placer de ensuci...