Pocas veces un libro me ha gustado tanto... Lo termino con pena y aunque sólo he releído una vez en mi vida un título, con éste podría hacer la excepción.
Es un libro mágico desde la primera de sus páginas, hasta el epílogo. Cada letra se une a la siguiente en un entramado de trenzas de sentimientos y emociones que dejan en el corazón una huella imborrable, como el pintalabios deja su marca en el borde de la taza de café.
No puedo añadir mucho más, cuando las lágrimas aún asoman a mis ojos ante la pesada carga de la belleza de la historia que acaban de leer. Para los que no hayáis leído aún esta novela, os transcribo parte de un pasaje del capítulo EL FIN DEL MUNDO (PARTE II) (pág.515):
"Su cuerpo grande como un armario se incorporó con el latido del corazón, pues no te quepa la menor duda, la mujer tenía corazón y mucho más grande de lo que la gente creería. Repleto hasta los bordes, con kilómetros de estantes ocultos apilados hasta arriba. Recuerda que era la mujer con el instrumento atado al cuerpo en la larga noche iluminada por la luna, era la mujer que había dado de comer a un judío en su primera noche en Molching sin hacer ni una sola pregunta y era la mujer que había hundido el brazo en lo más hondo de un colchón para entregar un cuaderno de dibujo a una adolescente".
De ese mismo capítulo en la página anterior destaca para mí esta frase: "¿Quién estaba allí para tranquilizarlo cuando le arrancaron la alfombra de la vida bajo los pies dormidos?"
Os dejo que degustéis como se merecen ambos regalos para el alma de lector que todos lleváis dentro. Si lo leéis o lo habéis leído no dejéis de dar vuestro parecer aquí.
tienes razon uno de los libros mas hermosos y llenos de sentimiento que he leido, quizas porque su narradora es un poco inusual y tambien la forma en que nos la presenta el autor, como muy humana con sentimientos... creo que posiblemente sea uno de los libros que yo tambien pudiera releer
ResponderEliminar